El secretario de Seguridad, Lucas Ventoso, informó en las últimas horas que al menos 700 motos con escapes ilegales fueron secuestradas por el municipio en el marco de los operativos que dan cumplimiento a una ordenanza sancionada hace cinco años.
“Ya hemos quitado de circulación en nuestro municipio 700 motos con escapes ilegales. Sabemos que aún quedan muchas motos en infracción por secuestrar, y la tarea no es sencilla. Pero continuaremos haciendo operativos diariamente hasta terminar con la circulación de motos que nos impiden vivir en tranquilidad”, precisó.
Se trata de una norma que fue aprobada por unanimidad en el Concejo Deliberante en 2018, con la finalidad de prohibir la circulación de vehículos que tengan caños de escape modificados para producir “contra explosiones”.
Los ediles buscaron en su momento evitar la contaminación sonora en el territorio y, para ello, se estableció una serie de controles viales “para verificar la generación de ruidos excesivos que afecten al público”.
En el documento se estableció que el vehículo debía ser retenido y el caño de escape decomisado para su destrucción en caso de constatarse la reincidencia de la infracción.
Según especificó Ventoso, los operativos viales se realizan con agentes de tránsito en conjunto con personal policial para garantizar mayor efectividad en los controles.