En las últimas semanas, las expectativas por la temporada de verano volvieron a repuntar en Pinamar. Como ocurrió en la mayoría de los distritos de la costa atlántica, el Mundial de Fútbol desarrollado en diciembre acató el interés de los posibles visitantes y, como consecuencia, gran parte del turismo optó por reservar a último momento.
Pese a que el sector turístico local espera completar “una buena” temporada estival, no se prevé nuevos récords de ocupación, como sucedió el verano pasado. En los meses previo a diciembre se auguraban altos índices en las reservas, pero la expectativa fue disminuyendo a medida que finalizó el año.
El secretario de Turismo, Juan Ibarguren, explicó que existen varios factores que marcan la diferencia con la temporada 2022. “Este año estimamos que estaremos en un promedio del 90% con picos de ocupación plena los fines de semana”, afirmó.
Cabe recordar que el mercado inmobiliario de Pinamar contiene 300.000 plazas hoteleras y extra hoteleras. Según datos divulgados por la Asociación Empresarial Hotelera y Gastronómica (AEHG) en el pasado fin de semana Pinamar registró el mayor número de ocupación 87.93%. En tanto, Cariló anotó el 84.88%.
En ese contexto, el presidente de la AEHG, Pedro Marinovic, analizó: “No están dadas las condiciones económicas para que se repita un porcentaje de ocupación similar al del verano pasado. La presión fiscal es grande, la carga impositiva obliga a tener una tarifas altas”.
El empresario entendió que “el turismo en general para el argentino dentro del país está difícil”, y vaticina una temporada de verano “parecida a los de 2018 o 2019″.