La cooperativa de agua y luz de Pinamar ultima detalles en la construcción de la cisterna emplazada en Anspach y Misiones, una obra que busca mejorar la red de agua potable en la localidad de Ostende.
En los últimos meses, se avanzó en trabajo electromecánicos sobre un proyecto que se inició hace años. Durante marzo, la cooperativa y finalizará la instalación de equipamiento y se avanzará en la puesta en marcha de los equipos y bombas.
“La idea es que en 30 o 45 días la cisterna ya esté funcionando con las primeras pruebas y después hay que readecuar gran parte de la red de Ostende”, precisó el presidente de la Calp, Bruno Nicolini.
Con la nueva cisterna habrá un suministro de agua con presión y caudal constante y sin caídas en horas pico en esta localidad, pero antes deberá modificarse el esquema de red que había sido creadas para otro soporte.
“Durante el resto del año se va a ir trabajando en las adecuaciones de la red y en las bombas nuevas para ir de a poco mejorando el sistema”, dijo el Nicolini.