Roberto Porretti (65), exintendente de Pinamar, fue hallado sin vida el 7 de junio en el fondo de la pileta del Club San Vicente, lugar que solía frecuentar para su entrenamiento de nado y apnea. Los testigos presenciales, Eduardo Dotto y el guardavidas Javier Pavón, intentaron reanimarlo tras percatarse de que no emergía, pero sus esfuerzos resultaron infructuosos.
Según reveló el portal Infobae, Pavón -quien estaba a cargo de la seguridad en el turno de 8 a 15 horas- informó que Porretti había completado varias pasadas en estilo subacuático antes de quedar inmóvil a unos veinte metros del borde de la pileta.
Dotto, quien nadaba en un andarivel paralelo, declaró que notó algo inusual cuando Porretti no salió a la superficie como era habitual en su rutina. Ante la ausencia de signos vitales, intentaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) mientras aguardaban la llegada de Emergencias Pinamar.
Dificultades en la reanimación
Durante el proceso de rescate, Dotto detalló las dificultades técnicas encontradas al intentar utilizar el desfibrilador. Explicó que el dispositivo no lograba conectarse, posiblemente debido a que el cuerpo de Porretti estaba mojado o presentaba mucho vello. Esta complicación obligó a los rescatistas a seguir con la RCP mientras aguardaban el auxilio médico, que arribó minutos después. A pesar de los esfuerzos de los paramédicos, Porretti fue declarado muerto en el lugar.
Testimonios bajo investigación
La causa se tramita bajo la carátula de “Averiguación de causales de muerte” en la UFID N.º 6 de Villa Gesell. El abogado de la familia, Jonatan Loza, solicitó que tanto Dotto como Pavón brinden detalles adicionales sobre el seguimiento y control visual que se hizo de la actividad de Porretti en la pileta ese día. En su declaración, Loza remarcó la importancia de determinar la exactitud del tiempo de permanencia bajo el agua, un dato que podría esclarecer las circunstancias del fallecimiento.
Asimismo, el abogado solicitó acceder a las grabaciones de seguridad del club, las cuales, según el establecimiento, solo funcionan en línea sin opción de grabación. Este detalle es también objeto de pericia para determinar los momentos previos al incidente.
Dudas y pericias pendientes
Nilda Martínez, pareja de Porretti, expresó dudas sobre las circunstancias del fallecimiento, dado que, según sus palabras, el exintendente “gozaba de buena salud y mantenía una rutina física activa”. Estas inquietudes llevaron a la familia a solicitar pericias médicas forenses adicionales para confirmar las causas de la muerte y establecer el tiempo exacto de permanencia bajo el agua.
Hasta el momento, la causa sigue su curso mientras se esperan los resultados de las pericias forenses, cuyo propósito será aportar claridad sobre los momentos finales de la vida de Porretti y ofrecer respuestas concluyentes.